Lo que me sostiene en la vida es la
certeza de saberme amado y entender que todo lo que vivo merece la pena. Pero
en ocasiones me pregunto cuál es mi camino, mi misión, qué quiere Dios que
haga. «Dicen que naces para algo, pero ¿cómo sabes qué es esa cosa? ¿Qué pasa
si eliges la incorrecta? O la de otra persona, y quedas atrapado».
He nacido para algo, tengo
una misión delante de mis ojos y a veces no la veo. Hago cosas, vivo
experiencias, ¿tengo claro lo que
quiere Dios para mi vida?
¿Y si me equivoco de misión? Un año más ante mis ojos. ¿Será el año en el que sepa el sentido de lo que
hago? ¿Seguiré haciendo lo mismo que hasta ahora?
No sé qué
voy a hacer con mi vida, pero sí sé que voy a vivir cada minuto de ella. Trato
de acertar con mi propósito, con mi sentido, con mi misión. ¿Y si no acierto? ¿Y si me meto en la piel de otro
queriendo vivir su vida y no la mía?
Corro el peligro de no ser fiel a lo
que dice mi corazón. Simplemente quiero aprender a vivir el presente con un sentido.
Haz un mundo
mejor. Procura que tu familia sea un santuario de amor. Ama sin condiciones. Proclama
que Dios nos ama y quiere nuestra felicidad. Vive el hoy intensamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario