VIERNES 24 DE SEPTIEMBRE 2021
Del Evangelio según
Lucas 9,18-22: Estando una vez orando a solas, en
compañía de los discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?» Ellos
respondieron: «Unos, que Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que un
profeta de los antiguos ha resucitado.» Les dijo: «Y vosotros, quién decís que
soy yo?» Pedro le contestó: «El Cristo de Dios.» Pero les mandó enérgicamente
que no dijeran esto a nadie. Dijo: «El Hijo del hombre debe sufrir mucho y ser
reprobado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser matado y
resucitar al tercer día.»
Reflexión
• El evangelio de hoy retoma el mismo asunto del evangelio de ayer: la
opinión de la gente sobre Jesús. Ayer, era a partir de Herodes. Hoy es el mismo
Jesús quien pregunta qué dice la opinión pública, y los apóstoles responden
dando la misma opinión que ayer. En seguida viene el primer anuncio de la
pasión, de la muerte y de la resurrección de Jesús.
• Lucas 9,18: La pregunta de Jesús
después de la oración. “Estando una vez orando a solas, en compañía de los
discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?” . En el evangelio
de Lucas, en varias oportunidades importantes y decisivas Jesús aparece
rezando: en el bautismo, cuando asume su misión; en los 40 días en el desierto,
cuando vence las tentaciones del diablo con la luz de la Palabra de Dios; por
la noche, antes de escoger a los doce apóstoles; en la transfiguración, cuando
con Moisés y Elías conversa sobre la pasión en Jerusalén; en el huerto, cuando
se enfrenta a la agonía; en la cruz, cuando pide perdón por el soldado y
entrega el espíritu a Dios-
• Lucas 9,19: La opinión de la gente
sobre Jesús. “Ellos respondieron: "Unos, que Juan el Bautista; otros, que
Elías; otros, que un profeta de los antiguos ha resucitado." Al igual que
Herodes, muchos pensaban que Juan Bautista hubiera resucitado en Jesús. Era
creencia común que el profeta Elías tenía que volver. Y todos alimentaban la
esperanza de la venida del profeta prometido por Moisés. Respuestas
insuficientes.
• Lucas 9,20: La pregunta de Jesús a los
discípulos. Después de oír las opiniones de los demás, Jesús pregunta: “Y
vosotros ¿quién decís que soy yo?”. Pedro respondió: “¡El Mesías de Dios!”
Pedro reconoce que Jesús es aquel que la gente está esperando y que viene a
realizar las promesas. Lucas omite la reacción de Pedro tentando de disuadir a
Jesús a que siguiera por el camino de la cruz y omite también la dura crítica
de Jesús a Pedro (Mc 8,32-33; Mt 16,22-23).
• Lucas 9,21: La prohibición de revelar que Jesús es el Mesías de Dios. “Pero
les mandó enérgicamente que no dijeran esto a nadie”. Les está prohibido el que
revelen a la gente que Jesús es el Mesías de Dios. ¿Por qué Jesús lo prohibió?
Es que en aquel tiempo, como ya vimos, todos esperaban la venida del Mesías,
pero cada uno a su manera: unos como rey, otros como sacerdote, otros como
doctor, guerrero, juez, o ¡profeta! Nadie parecía estar esperando al mesías
siervo, anunciado por Isaías. Quien insiste en mantener la idea de Pedro, esto
es, del Mesías glorioso sin la cruz, no va a entender nada y nunca llegará a
tomar la actitud del verdadero discípulo. Continuará ciego, como Pedro,
cambiando a la gente por un árbol. Pues sin la cruz es imposible entender quién
es Jesús y qué significa seguir a Jesús. Por esto, Jesús insiste de nuevo en la
Cruz y hace el segundo anuncio de su pasión, muerte y resurrección.
• Lucas 9,22: El segundo anuncio de la pasión. Y Jesús añadió: "El Hijo
del hombre debe sufrir mucho y ser reprobado por los ancianos, los sumos
sacerdotes y los escribas, ser matado y resucitar al tercer día.” La
comprensión plena del seguimiento de Jesús no se obtiene por la instrucción
teórica, sino por el compromiso práctico, caminando con él por el camino del
servicio, desde Galilea hasta Jerusalén. El camino del seguimiento es el camino
de la entrega, del abandono, del servicio, de la disponibilidad, de la
aceptación del conflicto, sabiendo que habrá resurrección. La cruz no es un
accidente de camino, sino que forma parte del camino. ¡Pues en un mundo
organizado desde el egoísmo, el amor y el servicio sólo pueden existir
crucificados! Quien hace de su vida un servicio a los demás, incomoda a los que
viven agarrados a los privilegios, y sufre.
Para la reflexión personal
• Creemos todos en Jesús. Pero algunos
entienden a Jesús de una manera y otros de otra. Hoy ¿cuál es el Jesús más
común en la manera de pensar de la gente?
• La propaganda ¿cómo interfiere en mi
modo de ver a Jesús? ¿Qué hago para no dejarme embaucar por la propaganda? ¿Qué
nos impide hoy reconocer y asumir el proyecto de Jesús?
No hay comentarios:
Publicar un comentario